Más Que Torres Cayendo

Una Década de Zona Cero

Bienvenidos a las noticias del mundo. Un mundo de paranoia y muerte, de mentiras y crueles realidades, de conmemoraciones y alertas silenciosas.

Se cumplió una década del atentado a las Torres Gemelas en Nueva York (incluido el avión contra el Pentágono y aquella aeronave derribada en Shanksville - Pensilvania). Más allá de la cobertura que tal echo significa vale decir que a más de uno este número redondo, una década, lo transportó en el tiempo. A aquel momento en que pensamos: –ahora sí, está todo mal!

El peso simbólico no es menor. Mucha gente muere a diario, gente como tú y como yo. Gente que está en su lugar de trabajo, planeando su futuro, pensando cosas simples como que cenará en la noche, cuando de pronto se ve en medio de una balacera, de una pelea de intereses internacionales, de una batalla por demostración de poder, de un piso al que ingresa por la ventana un avión de línea cargado de otros cientos de inocentes del suceso. Pero aquella vez el simbolismo del hecho congeló el tiempo. No habían solo muerto personas, no eran solo escenas de una película increíble, no era solo el modo más aparatoso y espectacular de un atentado terrorista.

Alguien le había dado un tiro a quemarropa a Mickey Mouse. ¿Fue el Pato Donald? ¿Fue un cuento de terror? ¿Fue una venganza contra la supuesta inocencia de la cultura del fast food? El mundo ya no iba a ser mismo.

Diez años después cambió todo... y nada. Rápidamente se diseño un logo conmemorativo, se hicieron películas y documentales, se tejieron varias teorías conspirativas, los controles de seguridad generaron un negocio increíble, la paranoia inyectable por los medios de comunicación creció a niveles de sobredosis, la caza de brujas se hizo deporte oficial, cambiaron gobiernos allá lejos, se libraron supuestas guerras, creció formidablemente el presupuesto para defensa, la industria bélica creció como nunca y la ahora llama "Zona Cero" se convirtió es el sitio más visitado por turistas del todo el mundo para tomase fotos donde una vez estuvieron las torres.

Diez años después. Uno en el rancho, el otro bajo el mar, un presidente afroamericano intentado salir de la crisis económica, muchas muertes en el otro lado del mundo y el radioreloj despertador anunciándote cada mañana que sigas alimentando tu paranoia porque en tu miedo y tu inocencia hecha raíces el poder que te somete.

¿Y por qué será tan tentador tomarse fotos allí? ¿Será que inconcientemente queremos dejar registro de que todavía no nos asesinó la brutalidad del poder humano? ¿Será que somos simples idotas queriendo demostrar nuestra falsa inmortalidad fotografiándonos en el mismo lugar donde cayó lo que parecía imposible? ¿Será que solo queremos presumir que estuvimos en el lugar, afortunadamente en otro tiempo?

Pasaron 10 años, una década en la que todos, como humanidad, perdimos un poquito más de inocencia.

Entre conmemoraciones, confusiones, acciones, reacciones e historias que son tan nuestras como ajenas: nosotros les damos la bienvenida al kaos total!!!!!