Guerras de Todo Tipo

Y Las Típicas Guerras

El Pirata | 4 de Agosto de 2014 | ECDQEMSD

Bienvenidos a las noticias internacionales de un planeta en guerra.

Guerras por territorio, guerras por riquezas, guerras por religión, guerras por recursos, guerras por el poder, guerras para mantener la maquinaria armamentista, guerras económicas, guerras por la guerra en sí.

En casi todas los pueblos son rehenes, no deciden, les importa bastante poco las causas, ignoran los intereses que las promueven, no las alientan... pero son los únicos damnificados, los masacrados, los perjudicados y las victimas.

No es ninguna novedad, de guerras siempre venimos, a guerras siempre vamos y como todas las imágenes siempre parecen ser de "otros" no terminamos de aprender nada.

Un misil entra por la ventana de la habitación de un niño con la camiseta de Barcelona, una figura de Mickey Mouse en la pared y una frase del Corán pintada sobre su cama. No hay más nada. Ni pared, ni cama, ni niño. ¿Alguien le explicó por qué su destino fue ese? Seguramente no, y si se lo explicaron fue seguramente con mentiras. Guerra porque la tierra nos queda chica, guerra porque creo que las cebras son caballos rayados, guerra porque creo que los caballos son cebras sin rayas.

Y mientras Obama decía que le agradaba Katy Perry y que efectivamente el pentágono torturó gente después del 11S porque estaban todos muy nerviosos, condenaba el secuestro de un soldado israelí con la misma vehemencia que la ONU condenaba los bombardeos que Netanyahu decidió seguir hasta el final. Bueno, no tanto, lo del soldado fue más condenado que los, hasta el momento, más de dos mil muertos palestinos y contando.

¿Ahora se explican por qué la desesperación de muchas regiones en querer ser Estados? Una cosa son miles de muertos de una zona separatista, de una autonomía, de una región rebelde, de una sección territorial, y otra, muy otra, de un Estado Nación. En realidad muere la misma gente, pero la comunidad internacional no puede ser tan ciega sorda y muda en esos casos, o al menos no tan distraída lenta y apática.

Hay guerras declaradas, guerras solapadas, guerras escondidas, guerras abiertas, guerras que resuenan y guerras sin balas. Todas de un modo u otro provocan muertos, destrucción, injusticias, violaciones y humillaciones inhumanas... o mejor dicho, cosas típica y lamentablemente humanas.

Tenemos la guerra de los laboratorios y las patentes, la guerra contra el Ébola, la guerra de las marcas, las guerras por el poder y sus batallas cotidianas.

El ejecutivo venezolano detuvo al ex jefe de seguridad del comandante Chávez, el general Vietri. Razón, la que más está de moda en la República Bolivariana, tramar un plan para derrocar a Nicolás Maduro. Guerras desde adentro, guerra desde afuera.

Guerras contra la violencia que engendran más violencia.

Guerra en Siria, guerra en Ucrania, amenazas de guerra y guerra de amenazas. Las fronteras siempre son buena justificación. La respuesta a la crisis fronteriza de Estados Unidos elevó el número de patrullas paramilitares en la zona, grupos armados que de tanto mirar películas de cowboys salen en sus 4x4 a la caza de indocumentados mientras otros indocumentados les cuidan los niños en la casa y les cocinan sus hotdogs.

También tenemos guerras que llevan tiempo y parecen imperceptibles. Uno de los lideres indígenas Yanomamis pidió protección al gobierno de Brasil porque fue, una vez más, amenazado de muerte por unos pistoleros enviados por mineros ilegales y madereros que operan en la selva virgen. Guerra por recursos, guerra por territorio, guerras silenciosas de arco y flecha contra topadoras y armas largas.

En Argentina la batalla económica tuvo sabor a derrota. De un lado de la trinchera los inversionistas más duros exigiendo el pago, del otro un gobierno que vende humo y al que le fascina cambiar la definición de los hechos. En medio un juez. Bueno, en medio es un decir, en realidad un señor con tunica que responde a los intereses de los poderosos y que solo repite: hay que pagarle a estos señores aunque ese ridículo país sudamericano se hunda en el océano Atlántico.

Toda una guerra dispar, resultado, esa fotografía de más gente revolviendo basura y la leche saltando de precio en el supermercado a donde antes iban de compras los que tenían empleo. ¿Todo por un bono de deuda que exigen cobrar apenas un mínimo porcentaje de los bonistas? Sí, así es la guerra.

En México pasó algo curioso que cabe destacar, en plena guerra por la aprobación total de la Reforma Energética el PRD se opuso pintorescamente en la cámara de diputados actuando el funeral de PEMEX y CFE con miles de flores y el busto del general Lázaro Cárdenas. Y en un momento hubo que suspender la sesión porque la diputada del PT Aguilar gritó que había una serpiente en el recinto. -Serpientes hay muchas- dijo un diputado, pero está era de verdad, un ofidio rastrero se paseaba por el palacio.

Inmediatamente algunos ediles miraron la bandera y se espantaron, pensaron: ya bajó está, ahora se viene el águila, mejor votemos a conciencia... Pero eso duró poco, al ver que el águila seguía inmóvil en la bandera y no iba a descender, no al menos por ahora, todo siguió adelante dejando simplemente otro dato pintoresco del ya famoso procesos de reformas. Una guerra por los recursos, una guerra económica, una guerra soberana que al menos se ejecuta sin misiles ni balas.

Y así estamos en este mundo, este planeta, está madre tierra, justamente comienzo de agosto día de la Pachamama. Una tierra basta y generosa, inmensa y variada, pero siempre en guerra.

¿No hay espacio para todos? Si lo hay. ¿No hay alimentos para todos? Sí lo hay. ¿No hay suficientes recursos? Sí los hay. ¿No se puede convivir? Si, se puede.

¿Hay voluntad para eso? No, evidentemente no.

Mucho en manos de pocos, mucho poder, muchos recursos, mucho de todo; y todo aquello que intente señar esta sin razón se convierte en amenaza. Amenaza de guerra.

Damas y caballeros, bienvenidos al kaos total!!!!!!