Una Vez en el Llano

La Cumbre de las Américas

El Pirata | 13 de Abril de 2015 | ECDQEMSD

Bienvenidos a las noticias internacionales de la cumbre de la cumbre y el descenso al llano.

Que el paso del tiempo es un factor determinante en la historia es una obviedad, pero por un segundo podemos imaginar a alguien acercándose a Fidel Castro en Bahía de los Cochinos diciéndole: "Comandante en unas cuantas décadas su hermano se estará dando la mano con el primer presidente afroamericano de Estados Unidos". De seguro Fidel le hubiera respondido -sí claro y yo apareceré una vez al año con un trajecito deportivo multicolor.

Increíble, pero así pasó. Cuando ya habíamos corroborado la completa inutilidad de las primera, segunda, tercera, cuarta, quinta y sexta Cumbre de las Américas, la séptima pasó a la historia. Lógicamente el saludo entre los presidentes de Cuba y Estados Unidos fue lo protagónico, pero hubo muchas cosas más.

Correa habló de lo mucho mejor que está Ecuador. Y de pasó una patadita a Estados Unidos. Evo Morales jugó al futbol con un grupo de estudiantes. Y de pasó una patadita a algún contrincante. Tabaré Vázquez se sentó junto a Obama en la cena. Y de pasó una patadita a Nicolás Maduro. Y Nicolás Maduro hacia su discurso entre denuncias contra Barack Obama. Y de paso, disposición al dialogo.

Lo malo es que Obama no estaba mientras Maduro hablaba -grábamelo en un disco, luego lo veo en casa- pero igual se encontraron en la periferia del estrado y dialogaron. Aparentemente Obama le explicó lo mismo que intentó explicarle el consejero del Departamento de Estado, Thomas Shannon, cuando una semana antes viajó a Caracas y trato de calmar los nervios del gobierno venezolano antes de llegar a la Cumbre en panamá.

La cuestión es que aunque el clima parecía muy tenso en realidad todo fue paz y amor; aunque con discurso reprochante a Estados Unidos y críticas directas, todo paz y amor, luego del discurso de Raúl Castro.

Raúl hablaba con Barack, Dilma con Cristina, Dilma le decía a Barack que ya quedó atrás lo de la espiada y que en julio iba a visitarlo, Maduro habló con Obama al costado del ring, el presidente panameño Varela se enteraba que al ex presidente Martinelli le habían quitado los fueros y sonreía, las primeras damas se miraban los vestidos mutuamente y Peña Nieto se tomaba una selfi con Mark Zuckerberg que prometía internet gratis para todos.

Paz y amor se respiraban por todas partes. El fundador de Facebook fue el más solicitado; de hecho se me hace que los presidente ya saben que es él quien gobierna el mundo. -Oye y ¿quien es el negrito alto y simpático que vino con Mark? -Ese es obama. -Ahhhhhhhhh.

Y mientras nos hacíamos la gran pregunta, de si todo lo que se hablaba en la Cumbre llegará efectivamente alguna vez al llano, la presidenta de argentina hablaba como si fuera la reencarnación coqueta, millonaria, maquillada y medicada del Che Guevara. Alababa al eterno gobierno castrista y criticaba a Washington, es lógico nadie duda que si ella pudiera elegir vendería todos sus Louis Vuitton y apoyaría la revolución, terminó hablando del narcotráfico y de como el primer mundo comprador es el que blanquea divisas. Créame sabe de lo que habla. Y de como lavan millones en paraísos primer mundistas. Créanme sabe de lo que habla. Y de como todos los países del mundo debería luchar unidos contra ese flagelo. Sí, ahí ya no sé si sabia de lo que hablaba, pero bueno... Así se despidió de su última Cumbre dando clases de marxismo, capitalismo salvaje, política internacional norteamericana, castrismo e inversiones en Miami.

En serio que esta Cumbre pasará a la historia, es que fue la Cumbre más loca, esquizofrénica, hilarante y sorpréndete que yo tenga memoria. Todos decían cosas que eran imposible que pasen desapercibidas, sin embargo todo quedaba intrascendente cada vez que pensábamos que después de más de cincuenta años Cuba y Estados Unidos se daban la mano.

Maduro dijo que tenia pruebas de que desde la embajada gringa en Venezuela tenían un sinfín de planes para matarlo. Pero Raúl y Barack se daban la mano.

Rafael Correa no paraba de maldecir la ingerencia de Estados Unidos en el mundo. Pero Raúl y Barack se daban la mano.

La numerosa comitiva venezolana montada en barriles de crudo de treinta dólares que hace unos meses valían más de cien, andaba dando vueltas por todo el recinto. Pero Raúl y Barack se daban la mano.

Peña Nieto gritaba -otra selfi, otra selfi, así puedo decir que vine a hacer a Panamá-. Pero Raúl y Barack se daban la mano.

Cuba pidió que Estados Unidos la quite de la lista de países terroristas. Estados Unidos dijo que sí. Raúl y Barack se daban la mano.

¿Eso no es de risa? En tiempos de Estado Islámico, Al Qaeda, Isis, Boko Haram, decapitaciones masivas, atentados, avances militares, violaciones por guerras étnicas y mucho más... tener a Cuba como país terrorista es, como mínimo, desopilante. Aunque tampoco hay que menospreciar el poder de la caña, el ron, el Tropicana, el son del Buena Vista Social Club, los carritos viejos de La Habana y los horrendos discos de Gloria Stefan.

Y así podría asegurarles que hubo miles de noticias más, noticias deportivas, políticas, de espectáculos, tecnológicas, policiales, locales, internacionales; pero el presidente de Cuba y el de Estados Unidos se dieron la mano.

Increíble, sorprendente, que un día en que hubo a penas un poco de sensatez se convierta en un día histórico. Razonable, lógico, completamente comprensible si no miramos alrededor.

Ojala que estas cosas "históricas" que pasan en las cumbres lleguen al llano y aquellos que sufrieron de uno u otro modo la terquedad, mezquindad e irracionalidad de los devenires históricos, puedan sentir un poco de alivio y no se trate de una simple fotografía, histórica, de un día histórico, donde lo histórico fue la sensatez de reconocer que en cincuenta años... pasan muchas cosas.

Damas y caballeros, bienvenidos al kaos total!!!!