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"Cuando caí sabía que todo
se había acabado, que nunca más iba a jugar".
Con estas palabras y visiblemente emocionado Charles Wade Barkley
aceptó su retiro tras 16 temporadas en la NBA.
Iban tan solo ocho minutos del partido en el cual
su equipo, Houston Rockets
enfrentaba a Philadelphia 76ers., su primer "hogar" en donde
jugó ocho temporadas entre 1984 y 1992. El "Gordo" intentó
taparle un tiro a Tyrone Hill, cayó mal y se tomó la rodilla izquierda.
Un silencio sepulcral cubrió el First Union Center cuando dos asistentes
lo ayudaron a retirarse del campo de juego. Segundos más tarde se supo lo
peor: Sir Charles se había roto un tendón de su rodilla y debía
trasladarse urgente a un hospital, pero Charles prefirió quedarse sin
importar que su equipo sumara una nueva derrota (83-73). Eso no era lo
importante, él solo quería aprovechar sus últimos minutos como jugador
aunque sea detrás de la línea.
Fue un Rey sin Anillo en la liga más importante del mundo. Nunca pudo
salir campeón con ninguno de sus tres equipos: los ya citados y Phoenix
Suns. Sólo la falta de "un anillo" lo apartó de las
superestrellas como Magic Johnson, Larry Bird, Julius Earving y Michael
Jordan. Nunca estuvo tan cerca como cuando en 1992 perdió la final con
Phoenix ante Chicago Bulls (2-4) siendo considerado ese año como el
Jugador Más Valioso de la temporada.
Los números demuestran su grandeza. Anotó 23.755 puntos en 1195
partidos, aportó 4.697 asistencias y capturó 14.162 rebotes. Las
estadísticas marcan que sólo Chamberlain y Russell sumaron más de
23.000 puntos, 12.000 rebotes y 4.000 asistencias.
Antes de este inesperado retiro, Barkley ya había anunciado que le diría
adiós al basquet a fin de año, algo que casi se había convertido en un
ritual desde hace varias ediciones.
Pero no se esperaba este final. Sinceramente no lo esperábamos. Por eso
Charles gracias por estas 16 temporadas, gracias por tu magia dentro de un
campo de juego. Y desde ya el anillo que falta es el mismo que te une al
Hall de los mejores basquetbolistas de la NBA.
por Gustavo Kuffner |